Acércate, querido lector y déjame contarte una historia…
Una vez, al filo de la lúgubre medianoche mientras, débil y cansado, reflexionaba el solitario escritor, bañado por el resplandor de la pantalla de su ordenador portátil, agarró la botella y, con manos temblorosas, se sirvió otro trago para calmar sus nervios. Le habían pedido que escribiera un artículo sobre los lugares que más miedo daban del mundo; los lugares más encantados, espantosos, fantasmales y malditos, cuyos misterios ni siquiera se conocen.
Intentando dejar de lado sus sensaciones y pensando que eran tonterías, comenzó con la lista.
Mary King’s Close — Edimburgo, Escocia
Al estar lleno de edificios de hace cientos de años, todavía en uso hoy en día, en Reino Unido existen numerosas historias protagonizadas por fantasmas. ¿Qué acontecimientos pueden haber sucedido a lo largo de los siglos para que los espíritus de los afectados permanezcan libres? Es un buen punto para comenzar…
Bajo la capital escocesa hay un toda una red de túneles y pasadizos. Solía ser un área tan próspera que los comerciantes no sólo vendían sus productos y ofrecían sus servicios, sino que vivían allí. Más tarde, en 1645, el área se convirtió en escenario de un brote de peste. El lugar fue clausurado y se dejó morir a los que allí vivían y trabajaban.
Considerado hoy en día como uno de los lugares más embrujados de Escocia, la actividad paranormal se registró por primera vez a finales del siglo XVII, con declaraciones de personas que habían visto manos atravesando las paredes y que, al vivir en el piso de arriba, habían tenido pesadillas.
Hoy en día, los tours en busca de fantasmas exploran esta zona de la ciudad por la noche con lámpara en mano, y los visitantes dicen haber visto a una «mujer preocupada» vestida de negro y al fantasma de una niña que se hace llamar Annie. Incluso se sabe que el fantasma de Annie interactúa con los visitantes, pidiendo ayuda y comida.
Otros declaran haber escuchado los sonidos de una fiesta, el último y desesperado intento de ser feliz de un grupo de personas abandonadas y destinadas a morir en una tumba creada por ellos mismos.
Fuerte Bhangarh — Rajasthan, India
O el Fuerte de los Fantasmas, como se le conoce localmente. Fue abandonado en 1783, y en su época de apogeo era esencialmente una pequeña ciudad compuesta por templos, casas, palacios, muros y puertas (incluso un bazar) construido al pie de una montaña en el noroeste de la India. Sin embargo, incluso ahora, nadie se atrevería a ir cuando ya no hay luz y los lugareños están convencidos de que nadie sobrevive allí durante la noche.
Entonces, ¿qué ocurrió? Lo que una vez fue una comunidad próspera también fue el hogar de una princesa llamada Ratnavati. A las afueras de la ciudad vivía un mago, Singhia, que la primera vez que la vio, se enamoró de ella. Incapaz de escapar de la brecha entre la realeza y su vida solitaria, inventó un aceite encantado para que se enamorara de él.
Ratnavati, para tristeza del mago, descubrió sus maquinaciones. La princesa tiró la poción, que terminó derramada sobre una roca que, al principio de forma lenta pero luego cogiendo más velocidad se estrelló contra Singhia; este, con su último aliento, maldijo a la ciudad y a todos sus habitantes hasta la muerte, sin esperanza de renacimiento, hasta el final de los tiempos. Poco después, el fuerte fue invadido desde el norte por Mughals y sus 10.000 habitantes, incluida la princesa, fueron asesinados.
Hoy en día es un sitio de interés arqueológico, pero también atrae a cazadores de fantasmas y a interesados en lo paranormal. Se dice que los espíritus caminan durante la noche, intentando continuar con sus vidas en el bazar y pasar la eternidad en el Salón de Bailarines.
Los habitantes del pueblo creen que un día el hechizo desaparecerá. La princesa, dicen, es fuerte y renacerá. Cuando llegue ese momento, ella volverá a visitar la ciudad, y solo entonces se romperá la maldición, y los espíritus de los 10.000 habitantes asesinados finalmente descansarán en paz.
La casa de Monte Cristo — Junee, New South Wales, Australia
Este elegante edificio es uno de los más nuevos en esta lista, aunque es probablemente el edificio más embrujado de Australia, debido a una serie de hechos ocurridos entre 1885 (año de su construcción) y 1948, cuando los Crawley, la familia que lo había comprado, se mudó.
Los miembros de la familia y de su personal vivieron una serie de accidentes truculentos y trágicos, comenzando con la muerte de uno de los niños, que aparentemente cayó por las escaleras impulsado por fuerzas desconocidas. Una de las criadas de la familia se cayó (o se tiró) del balcón cuando estaba embarazada, y el encargado del establo murió en un incendio horrible.
Después de que los Crawley se mudaran, la propiedad quedó en manos de unos cuidadores, pero tampoco pudieron escapar de la maldición de la casa. Al hijo de uno de ellos lo hallaron encadenado en una de las casas de los trabajadores, junto al cuerpo de su madre muerta. Resultó que había estado allí durante cuarenta años. Murió en una institución mental poco después.
La casa es ahora una pensión y los huéspedes pueden disfrutar de un tour de lo más espeluznante antes de irse a la cama. ¿Pero qué pasó con Christopher y Elizabeth Crawley, la rica pareja que construyó la casa? Bueno, ellos también se han unido al panteón de los espíritus, y ambos ahora atormentan la propiedad junto con las demás personas caídas en desgracia en esa casa maldita.
La pensión Ancient Ram — Wotton-under-Edge, Gloucestershire, Inglaterra
Los pubs suelen ser algunos de los edificios más antiguos de las ciudades y en el Reino Unido esto es aún más cierto. Al ser un punto de encuentro en los que se reúne todo el pueblo, un lugar de referencia para los viajeros o simplemente un sitio en el que celebrar la vida (y la muerte), no es de extrañar que sean tan famosos.
La pensión Ancient Ram no podría tener un nombre más apropiado: fue construida hace casi 900 años, en 1145, y muchos han afirmado que es el edificio más embrujado del mundo. Construido en el sitio donde hubo hace unos 5.000 años un cementerio pagano, las historias hablan sobre la adoración del diablo, el sacrificio de niños y poderosos espíritus malignos.
De hecho, se conocen algunos antecedentes de este edificio. Por ejemplo, cuando John Humphries, el propietario actual, compró la posada en 1968, encontró los esqueletos de dos niños enterrados debajo de la escalera.
Si eres lo suficientemente valiente como para pasar la noche allí, los propietarios estarán encantados de enseñarte, mediante un recorrido, la historia del lugar. Por la noche, sin embargo, hablamos de un asunto diferente.
Su hija, Caroline, declara que los invitados han huido aterrorizados del fantasma de una chica asesinada llamada Rosie, una gran sacerdotisa pagana, mientras se oía la voz de un hombre que gritaba «¡fuera!», se podían ver muebles volando alrededor y escuchar más gritos agudos. Algunas personas incluso afirman que alguien invisible les ha agarrado de la mano o que sienten su presencia y su suave respiración…
Isla Poveglia — Venecia, Italia
Esta isla en la Laguna de Venecia también tiene, como Edimburgo, una historia con víctimas de la peste. Era una región deshabitada, pero en el siglo XIV estaba desprovista de gente.
Cuando la peste llegó a Venecia, la población aterrorizada envió gente a la isla ante la primera señal de síntomas; en algunos casos, la gente se recuperó tras pasar la etapa de fiebre, pero tenerla era básicamente una sentencia de muerte.
Los doctores encargados de detener esta plaga fueron enviados a apilar los cuerpos y quemarlos a todos en piras gigantes. Hoy, el suelo está compuesto en un 50% de cenizas humanas.
En el siglo XIX, la isla revivió, esta vez como la ubicación de un asilo para enfermos mentales. Siendo un lugar que ya era considerado un sitio de mal augurio, los médicos rutinariamente realizaban experimentos con sus pacientes, y en 1930 uno de los médicos se suicidó saltando desde el campanario.
La isla permanece abandonada desde 1975, aunque las personas que viven cerca afirman que todavía se puede oír la campana de vez en cuando. Los pescadores locales tampoco se acercan; no necesariamente porque esté embrujada, sino porque temen arrastrar restos humanos de las aguas de alrededor de la isla.
Al entrar en la isla, los visitantes dicen que les invade una sensación de temor o furia, un sentido de ira casi posesivo. Se oyen gritos y voces pidiendo auxilio, por lo que la mayoría de las personas terminan huyendo aterrorizadas…
La Penitenciaría Estatal del Este — Filadelfia, EEUU
Construida en 1829, esta prisión tipo fortaleza fue la primera en introducir el sistema de aislamiento, conocido como el Sistema de Pensilvania, y era utilizado como una forma de castigo. Nadie sabía cómo podría afectar esto a la mente humana, por lo que fue llevado a extremos inhumanos.
Los prisioneros eran aislados en una celda pequeña, comían solos, hacían ejercicio en solitario, y cada vez que quisieran queabandonaran la celda, les ponían una capucha negra sobre la cabeza. En menos de un siglo, el Sistema de Pensilvania fue eliminado, sobre todo debido a la cantidad de prisioneros que se volvieron completamente locos.
La prisión fue abandonada en 1971, pero aún se mantiene en pie y el vasto complejo de patios, muros, torres y bloques de celdas está abierto para visitas públicas. Los visitantes que se animen pueden ver todo, desde las cocinas hasta el “The Hole”, esos espacios solitarios que separaron a las personas de sus propias mentes. El recorrido también incluye una visita al “Death Row”, un lugar escalofriante, dejando de lado la historia del resto de la prisión.
Ya en 1940, la actividad paranormal allí era frecuente, pero desde su cierre, la actividad aumentó todavía más. Los visitantes han informado de figuras fantasmagóricas en las torres de guardia y sombras que se acercan a ti, pero que, al avanzar, desaparecen. El sonido de las pisadas en los pasillos abunda, las puertas se cierran por sí solas y, lo peor de todo, los sonidos de risas insanas se escuchan en el bloque de celdas número 12.
La Ciudadela de Halifax — Halifax, Nueva Escocia, Canadá
Una fortaleza clásica en forma de estrella en la cima de Citadel Hill, en Halifax, es el sitio perfecto para los aficionados a la historia y cazadores de fantasmas. Tiene alrededor de 300 años; fue originalmente construida en 1749 y reconstruida completamente en 1856.
De hecho, si no fuera por la Ciudadela de Halifax, es posible que no hubiera existido ninguna ciudad. La gran colina sobre la que se asienta, con vistas a una bahía de fácil protección, fue lo que convenció a los militares británicos de que este sería un buen lugar para un enclave de colonos.
Además del museo y de todas las atracciones de la historia viviente que ofrece la Ciudadela, también organizan visitas para ver a estos fantasmas a las a las 20:30 horas desde mediados de julio hasta finales de octubre. Es entonces cuando podrás aprender las leyendas más raras y escalofriantes del lugar.
Muchos de los visitantes declaran haber visto a un soldado con uniforme de personal de seguridad de prisiones, mientras que otros afirman haber visto a un hombre con una capa roja y una anciana que solo aparece en los espejos. Si a esto le añades voces incorpóreas, puertas que se abren y dan golpes sin razón aparente y la sensación de ser observado, así como repentinas náuseas y ráfagas de viento en las habitaciones sin ventanas, está claro que está sucediendo algo.